Grabación en el Seminario de Los Ángeles II

Si bien en un artículo anterior, Grabación en el Seminario de Los Ángeles, analizaba sin obtener una conclusión clara la procedencia de una voz que se coló en mi grabadora aquel día, en esta ocasión quiero analizar la otra grabación que dejé en el aire cuando realicé el análisis objetivo de mis primeras grabaciones.
En un principio llegué a descartar este audio, ya que responde en mucho al patrón de las pareidolias por golpes. Recordaros que en nuestro vídeo publiqué muchos registros que más tarde di por inválidos por este motivo. Unas pisadas, una casual combinación de golpes y otros ruidos, son sonidos que provocan en ocasiones que creamos escuchar una voz donde no la hay.

¿Cómo llego a la conclusión de que un audio es una pareidolia por ruido? Trataré de explicar los puntos que para mí son clave:

  1. Sonidos o voces siempre susurrantes: cuando nos encontramos una pareidolia de este tipo, las supuestas voces siempre nos parecen susurrar, independientemente de lo que parezcan decir. Nunca alzan la voz, nunca gritan, no hay vocales claras en la pronunciación. Esto es algo que ya nos debe poner en alerta, ya que, sean lo que sean esas voces, dudo que se pasen la vida susurrando.
  2. Sílabas entrecortadas: aunque a veces creemos oír una palabra o frase completa, el ritmo en la pronunciación no suele ser constante. Por ejemplo, supongamos que tenemos una grabación en la que oímos "puedo verte", pero los tiempos de pronunciación hacen que se oiga "pue dover, te". También deberíamos tener en cuenta esto, ya que si realmente fuera una voz no debería hablar de esta forma, y es un error bastante frecuente entre los que nos dedicamos como aficionados a esto dar por válido este tipo de grabaciones, ya que se dan con mucha frecuencia.
  3. Mezcla entre golpes reales y supuestas sílabas o palabras: esta es quizá la pista que mejor nos ayudaría a identificar si una grabación puede ser una voz o no. Como expliqué al principio, una combinación de ruidos puede provocar ciertos ecos y producir palabras por el simple hecho de ser recogidos por la grabadora. Si a la vez que la supuesta voz encontramos diferentes golpes, debemos fijarnos en si estos golpes coinciden con las sílabas de la palabra o frase en cuestión. A veces ni siquiera van acompasados, pero el origen es el mismo. En alguna ocasión he puesto a prueba mi grabadora pisando escombros, hierbas y haciendo todo tipo de ruidos, y he encontrado infinidad de pareidolias, todas descartables claro.
  4. Letras concretas: letras como la P, T, S, J, F y ciertas más son fácilmente reproducibles haciendo ruido. Debemos desconfiar si obtenemos demasiado a menudo grabaciones que contengan en exceso este tipo de letras, ya que el ruido que dejan nos da la impresión de que lleva una vocal detrás. Un par de golpes que parezcan una P y una T perfectamente nos pueden dar la impresión de que digan "ponte", por ejemplo. No quiero decir con esto que se descarten las grabaciones que tengan estas letras, sino que seamos especialmente críticos si vemos que aparecen en exceso.
Una vez aclarado todo esto, paso a explicar por qué no he descartado la grabación que vamos a analizar. En primer lugar vamos a escucharla, y acto seguido la analizaremos.



Grabación original tal como la recogió la grabadora




Grabación con el ruido filtrado de fondo


Si bien la grabación original ya deja entrever que hay algo, el proceso de filtrado desvela cosas como mínimo curiosas. Retomemos las pautas que describí antes para discriminar una pareidolia por ruidos de lo que no lo es.

El primer punto coincide en cuanto a susurrar se refiere, si esto es realmente una voz, efectivamente está susurrando. Esto fue lo que en un principio me hizo sospechar de la veracidad de la grabación, pero después de pensarlo tuve que replantear el tema.

El segundo punto hablaba de los tiempos en la pronunciación de una frase, esto ya me puso en alerta ya que mi interpretación sobre esta grabación es que dice "cogedle, que a este lo mato". Podemos apreciar que la pausa que se oye podría ser la pausa natural de una coma, mientras que "cogedle" y "que a este lo mato" están relativamente bien pronunciadas, en cuanto al tiempo se refiere. Pero claro, no tiene por qué dejar de ser una coincidencia solo por esto, así que tiene que haber más razones para pensar que es una psicofonía.

En el tercer punto me centraba en buscar cualquier tipo de ruido o golpe que pudiera provocar la pareidolia, la mayoría de mis audios en el lugar no eran más que eso, pero esta grabación en concreto no responde a ningún ruido ambiental como puede apreciarse. Como referencia para comparar, podéis volver a ver el vídeo y comparar supuestas psicofonías como "en la casa, en el despacho" o "hay alguien más que tú" y podréis apreciar los golpes que acompañan a las sílabas. No se aprecia ruido alguno que pueda provocar esta voz, ni segundos antes ni segundos después de producirse.



Y el cuarto punto aludía a la confusión entre golpes y ciertas letras. Sin embargo, en esta grabación se aprecian perfectamente letras que difícilmente podrían ser reproducidas por un ruido, como la G, la L o la M. Siempre desde mi punto de vista después de tanto pensar en esto. Tenemos que unir a esto que las vocales parecen bastante claras.

Es por todo esto por lo que no he sido capaz de descartar esta grabación. Espero que mi análisis os haya entretenido. Me gustaría que este tipo de artículos fueran comentados y opinados, vuestros comentarios me pueden servir de mucho para seguir en mis investigaciones. Gracias a todos.

Jorge Liébana. Grupo D.R.E.S.