No, no estaba de vacaciones, malpensados. Tampoco me había aburrido de esto, ¡ni mucho menos! Simplemente me he tomado un tiempo para probar cosas, recabar datos, pensar en lo que estoy haciendo, incluso conocer a personas de las que he podido aprender mucho y seguiré aprendiendo. Pero eso es otra historia.
Los que hayáis seguido este blog ya sabéis que estoy intentando empaparme del "mundillo" de la TransComunicación Instrumental. Si bien hasta ahora mis experimentos son tan básicos como inconclusos, sigo manteniendo mi curiosidad por todo este fenómeno, que de vez en cuando me deja algún regalo con el que seguir ilusionándome.
Aunque no haya dejado de lado la investigación de campo, mis intentos por conseguir resultados pasan en gran parte por la experimentación en "laboratorio". ¿Que cómo es mi laboratorio? Unas cuantas radios, un ordenador, una grabadora y poco más, en un lugar tranquilo, aislado, silencioso y al que puedo ir cuando me plazca y pasar el tiempo que quiera. Nadie tiene un manual sobre cómo montar un laboratorio de experimentación con psicofonías, así que cada cual elija el suyo. Y para mí, este laboratorio es perfecto.
En uno de esos ratos que pierdo charlando con una radio desintonizada, perdí por un momento la paciencia y la tranquilidad. Agarré la grabadora digital y empecé a realizar preguntas al silencio que me rodeaba. Solamente pregunté sobre cómo podía utilizar una radio para contactar con lo que fuese que haya ahí, haciendo especial incapié en las frecuencias que debía sintonizar para lograrlo. Solo grabé durante unos dos minutos, algo menos. Me aseguré de que en ese tiempo no se oía nada que pudiera confundirme, y me llevé la grabación a casa.
En una primera escucha apareció una voz entre el tenue ruido de fondo, así que me centré en eso. La sorpresa fue mayúscula cuando entre mis preguntas insistentes sobre frecuencias de radio para experimentar surge esto:
No la muestro ni repetida ni editada, escuchadla cuantas veces queráis. Solo la he amplificado un poco para que fuera audible. Como suele pasar con las psicofonías, el audio es interpretable según quien lo escuche. Pero he de resaltar dos cosas muy importantes: en primer lugar, ha sido grabada en un entorno totalmente controlado, mi "laboratorio". Y en segundo lugar, a su favor tiene el haberla cotejado con la opinión de varias personas, práctica habitual en mí, y su interpretación coincide con la mía en cinco de las siete opiniones que pedí. Es un porcentaje muy alto en relación a otras grabaciones que he sometido a evaluación.
¿Cuál es mi interpretación? Me parece oír que claramente dice "siete". Parece absurdo, pero en el contexto en el que se grabó no lo es tanto. En los dos minutos que estuve grabando pregunté insistentemente cómo podía experimentar con una radio y qué frecuencias podría usar para ello. Normalmente experimento en la onda corta, una banda que va desde los 2,5 hasta los 21MHz, aproximadamente. Es una banda casi en desuso en España, aunque se pueden recibir emisoras de lugares tan lejanos como Inglaterra, Alemania o países árabes. Cualquiera que tenga una radio más o menos antigua puede comprobarlo.
El caso es que inmediatamente relacioné ese "siete" con los 7 MHz que se pueden sintonizar en esa onda corta, así que tras pensarlo bien y cotejar la información con varias personas, decidí mover el dial hasta esa frecuencia. No sé por qué, hasta el momento nunca había bajado a los 12 MHz a la hora de buscar "algo", pero fue mover la rueda de mi vieja radio hasta los 7 y encontrarme con algo. No es un algo espectacular, paranormal o increíble, pero sí es algo que una vez encontré y llamó la atención de varios entendidos en el tema, y con el tiempo lo perdí. Una modulación, un ruido que va y viene y que parece bailar entre las distintas frecuencias, apareciendo y desapareciendo a su antojo. Y ahí estaba, en los 7 megaherzios, con una claridad y una potencia que hasta ese momento nunca había podido captar. Tal que así suena la modulación, recogida por la grabadora.
¿Por qué me llama la atención un sonido así en una radio desintonizada? Porque en mi aprendizaje inicial recibí pautas de parte de auténticos expertos en el tema, y la primera vez que capté un sonido así produjo una respuesta positiva por parte de algunos. Fue en otra frecuencia, de forma aleatoria y débil, pero por casualidades (o no), justo en la frecuencia de los 7 MHz me encuentro con este dichoso ruidito, que no solo aparece con una nitidez y potencia inauditas, sino que siempre que me dispongo a experimentar está ahí, al contrario que hasta ahora, que lo encontraba en otras frecuencias y en poco tiempo desaparecía sin dejar rastro.
Haciendo honor a la verdad, he de decir que hasta ahora esta modulación extraña no me ha aportado nada positivo, no he recibido ninguna voz ni sonido identificable que pueda tomar como prueba para seguir mis investigaciones. Pero comprenderéis que el solo hecho de, mediante una simple grabación, mover el dial hasta esa frecuencia y encontrarme de frente con un sonido al que le intentaba seguir la pista sin mucho éxito, y de una manera tan clara y continua, hace que no crea mucho en las casualidades. Cada cual puede interpretar lo que quiera, pero este hecho para mí se queda, y no hace más que impulsarme a seguir con el proceso, aunque siga sin tener nada irrefutable que ofrecer. Los que crean ciegamente en el fenómeno de la transcomunicación podrán decirme que estoy ante algo inaudito, mientras que los más escépticos y negacionistas dirán que no hago más que perder el tiempo y que es una chorrada. Pero no os olvidéis de que yo me encuentro en un punto intermedio en el que ni apruebo ni desmiento nada, mi único deseo es experimentar por mí mismo lo que sucede con este fenómeno, y en base a mis descubrimientos voy progresando.
Gracias a todos los que habéis leído el artículo, quizá no sea resultadista, pero para mí por el momento supone dar un paso más en este extraño y caprichoso fenómeno. Y por supuesto, pienso seguir en la senda de experimentar según mis propios resultados.
Jorge Liébana. Grupo D.R.E.S.
